Memorias Sudcalifornianas evoca fragmentos de vida de artesanos de Baja California Sur para vislumbrar a través de la memoria colectiva la cara que conforma el quehacer artesanal en la identidad sudcaliforniana. Algunos de estos artesanos resguardan saberes heredados del conocimiento indígena, de las técnicas introducidas tras el establecimiento de los misioneros Jesuitas en el siglo XVII y de las osadas almas curiosas que continúan experimentando con los recursos naturales que esta árida tierra otorga. La actividad artesanal ha sido vital en la creación de objetos y herramientas para lograr la permanencia del hombre en este aislamiento peninsular.

Esta exposición es un proyecto derivado del catálogo digital Los Oficios de Mi Tata, el cual fue beneficiado en 2013 por el Programa de Apoyo a las Culturas Municipales y Comunitarias (PACMyC). En él se documentaron testimonios y se llevó a cabo un exhaustivo registro fotográfico de artesanos en las localidades de San Pedro de la Presa, Las Ánimas, El Rosario, El Triunfo, Pescadero, El Centenario y La Paz. La creación de este catálogo tuvo una misión doble: en primer lugar, identificar las fortalezas y retos con los que interactúan los artesanos locales, así como mostrar trabajos artesanales que a pesar de ser monocromáticos y parecer sencillos, son detallados y exigentes a la hora de su elaboración. Y en segundo lugar, promover el placer de viajar en Baja California Sur, no solo por su riqueza natural, sino también por el encuentro auténtico con el noble legado cultural que esta tierra ofrece al mundo.

Claudia Alexandra Parra Méndez


INTRODUCCIÓN

El desarrollo de la artesanía en Baja California Sur está unida indisolublemente con la colonización de la media península y el desenvolvimiento del sistema misional que posibilitó el surgimiento de una nueva sociedad compuesta por aquellos que acompañaban a los misioneros como soldados, artesanos y personas con otros oficios que después se quedarían como rancheros tomando en posesión los sitios de ganado, visitas de misión formando una red de ranchos muchos de los cuales al día de hoy existen en las serranías y en aquellos lugares donde la disponibilidad de agua y tierra permiten el desarrollo de las actividades primarias.

Fruto del desarrollo del sistema misional fue el surgimiento de una cultura de adaptación al medio, en la cual se utilizan los recursos naturales aprovechándolos para la elaboración de objetos utilitarios tales como zapatos, sombreros, cuchillos, cueras, monturas, mantas, fundas, cantaros, ollas, cazuelas, petates, camas, espuelas que reflejan una sociedad que vive de la ganadería y de una agricultura basada en huertos de los cuales se obtenían las frutas que se conservan en forma de ates o jaleas o bien hortalizas para el autoconsumo o comercio en pequeña escala.

Esta exposición muestra por una parte los objetos resultados de las condiciones que ostentan las comunidades asentadas en las serranías y en los campos pesqueros para dar solución a las necesidades más elementales como el vestido y la conservación de alimentos o el resguardo de los bienes. Así estos objetos representan también la transmisión de los conocimientos para la preparación de los materiales, para la confección y terminados en los cuales no existen grafías o elementos simbólicos sino motivos florales o en algunas ocasiones retratan las especies de la flora o la fauna de la región.

También se presenta los rostros de los artesanos que aun realizan su labor con la motivación de transmitir este conocimiento a las nuevas generaciones en las regiones de Valle Perdido, Las Animas, Los Dolores, El Triunfo, San Antonio, o en ciudades como La Paz. Algunos de ellos han participado en programas de fomento a la artesanía, concursos y premios estatales o bien por medio de programas como el Programa de Apoyo a las Culturas Municipales y Comunitarias (PACMYC).

Aún existe en esas comunidades rezagos importantes que limitan el desarrollo comercial de las distintas expresiones artesanales, aunado a lo anterior se suma las enormes distancias que existen entre dichas poblaciones y los centros turísticos y comerciales de La Paz, Cabo San Lucas y San José del Cabo que junto con la llegada de comerciantes venidos de otras entidades crean una competencia que difícilmente pueden superar, aunque cuenten con espacios como la Casa del Artesano Sudcaliforniano.

Esta exposición no solamente quiere ser un reconocimiento público a la labor de estos maestros del arte popular, sino voltear nuestra mirada a la gran herencia que existe como ejemplo de un largo proceso en el cual la historia fue modelando el desarrollo cultural de Baja California Sur, un espacio que debido a su rostro único bien fue bautizado como el Otro México.

José Ángel Avilés Mayoral


Viernes 12 de abril de 2019, 19:00 horas
Museo de las Misiones Jesuíticas de Loreto
Duración: 2 meses