Es una pequeña ciudad mexicana con huellas francesas, localizada en la parte central de la península de Baja California, frente al mar de Cortés. Es la cabecera del municipio de Mulegé, Baja California Sur y se localiza al norte del estado. Su arquitectura francesa de debe a la instalación de la compañía “El Boleo” en el año de 1885 por los franceses quienes asombrados por la abundancia del cobre en la región obtuvieron una concesión del Presidente Porfirio Díaz para extraer el material.