La población de Guerrero Negro nació en 1954, cuando un visionario norteamericano de nombre Daniel Ludwig, mismo que construyó el hotel Acapulco Princess en el puerto de Acapulco México, decidió instalar ahí una salina para abastecer la demanda de sal de la costa oeste de los Estados Unidos. Los mariscos aquí son frescos y abundantes, preparados a su estilo muy particular -y en un ambiente rústico especial. Por su ubicación estratégica es la ciudad más desarrollada a mitad de la península. La región lagunar Ojo de Liebre junto con los estanques de evaporación de la salina, constituye un hábitat de aves considerado como un sitio de importancia internacional dentro de la “red hemisférica occidental de aves playeras”; dentro del poblado de Guerrero Negro se puede visitar un refugio de aves donde los visitantes pueden observar y documentarse sobre las diferentes especies